viernes, octubre 24, 2008

El Hombre CROMA-ÑÓN GAto del jefe

Hola!

He vuelto del inframundo! Hace exactamente un año con 15 días publiqué por última vez algo en este blog tan abarrotado de gente...

Y para festejar que he vuelto, quiero platicar de una especie que anda rondando las oficinas y empresas mexicanas: el Hombre Croma-Ñón!

De seguro, la gran mayoría nos habremos topado con al menos un par de estos sujetos: el clásico sabelotodo, metomeentodo de la empresa, el que, a base de lustrar, abrillantar, cromar (de ahí el nombre) las gónadas del jefe, ha alcanzado una posición más o menos buena en la oficina...

Ese típico sujeto que, dada su escaza (o de plano nula) vida social (no digamos sexual!) dedica solo unas cuantas horas del día a dormir, para entregarse en cuerpo y alma a engordarle la cartera al patrón.
Ese sujeto que, si ha viajado, nos quiere hacer sentir mal diciendo que "en Canadá se trabaja así" "cuando estaba en Boston, hicimos asá" "en mis viajes a Bogotá descubrí que la mejor manera era blah blah blah".
Ese sujeto que estudió en la mejor campus de la mejor universidad (aunque haya sido becado o en una escuela patito que nadie conoce) y por lo tanto sabe más.
Ese sujeto que tiene especialidad en un tema y cree que por ello es mejor que los demás.
Este tipo de personas, son un verdadero cáncer!
Además de presumidos y bocones, se la pasan besándole la mano (y ve tu a saber que más) al jefe, apoyándolo en todo. Son como una esposita abnegada de los tiempos de doña Sara García obedeciendo ciegamente a sus maridos porque para eso es!
Pero, ¿porque dije que son un cáncer?
En la mayoría de los casos, la presencia de este especimen puede ocasionar las siguientes situaciones graves en la empresa:
1) El jefe se de cuenta que, más que un colaborador invaluable, lo que tiene ante el es un trinche lambiscón capaz de que, cuando llegue el momento, lo pisotée a el, cuando quiera su puesto.
2) El jefe se come toda la patraña de adulación de este mequetrefey le crée que todos los demás empleados, específicamente los que le pueden representar una sombra, son unos desgraciados mal agradecidos que solo piensan en ganar dinero y no en el bien que pudieran hacer a la empresa (sic) lo que implica que no haya reconocimientos ni premios al esfuerzo de los pobres tontos que solo trabajan y trabajan (sin lamer botas) o que, de plano, cuando el trabajador promedio se harte, renuncie o haga un pancho y lo despidan.
3) Empleados mediocres y holgazanes que le sigan el juego al croma-ñón, se convierten en iguales a el... aquí es donde comienza el cáncer: la céllula cromañona ha contaminado a células buenas y las ha convertido en otras cromañonas.
4) El croma-ñón consigue eliminar a los elementos buenos y se queda con sus croma-ñoncitos. Al final, nadie trabaja bien y la empresa tiene una crisis. Corren al jefe.
Esto por citar solo unos posibles eventos.

Yo en lo particular creo que son solo tipos pusilánimes que, a falta de algo bueno que dar, se la pasan mendigando reconocimiento, aún a costa de su propia dignidad, y acaban siendo acreedores de burlas y mentadas por parte de sus compañeros de trabajo.

Hace poco, platicaba con un compa (el que acuñó el término croma-ñón) y coincidimos en que, el día de mañana, ninguno de los dos le daría trabajo a un ente de estos, porque no suman nada a las organizaciones, solo dividen en grupos: los que están a favor y los que están en contra.

Weno... ya volví, ya aventé mi choro, ya me voy...

Saludos!
NecroDaddy

C'Ya!